El Reino de Marruecos, bajo la dirección de SM el Rey Mohammed VI, presidente del Comité Al-Quds, considera que la causa palestina es una cuestión central, subrayó el presidente de la Cámara de Representantes, Habib El Malki.
En su intervención con motivo del Día Internacional de Solidaridad con el Pueblo Palestino, celebrado el 29 de noviembre de cada año de conformidad con las resoluciones de las Naciones Unidas, El Malki indicó que «Marruecos, bajo la dirección de SM el Rey Mohammed VI, presidente del Comité Al-Quds, Gobierno, pueblo y Parlamento, siempre ha considerado la causa palestina como una cuestión central en su política, su enfoque, su conciencia, sus posiciones y sus compromisos, y así seguirá siendo», afirma un comunicado de la Cámara de Representantes.
El presidente de esta institución legislativa señaló que «la resolución mencionada de las Naciones Unidas no era arbitraria, sino más bien un reconocimiento de una realidad tangible y de una historia verdadera y un reconocimiento de un pueblo con una existencia geográfica, en los relatos históricos y en la memoria cultural y humana», señalando que Palestina es miembro observador de las Naciones Unidas y que la bandera palestina ondea en alto a la entrada de la sede de las Naciones Unidas en Nueva York.
«En este día del año 1947, la Asamblea General de la ONU adoptó una desafortunada resolución sobre la división de Palestina y es cada vez más lamentable que al pueblo palestino ni siquiera se le haya concedido la tierra otorgada por la resolución de la ONU», dijo.
Subrayó que esta situación es inaceptable y condenable, y añadió que el mundo civilizado que cree en la legalidad y la legitimidad internacionales no aceptará ni la narrativa israelí ni la política de hechos consumados.
El Malki llamó, al mismo tiempo, que se respetaran la ley y la legalidad, las convenciones y resoluciones internacionales que reconocen al pueblo palestino, al Estado palestino y a la causa palestina, incluida la cuestión de Al-Quds, en sus dimensiones religiosa, espiritual, cultural, de civilización y política.