Un comité de la ONU denunció la continua degradación de la situación de los derechos humanos en los territorios palestinos ocupados de Gaza y Cisjordania, así como Jerusalén Oriental, a causa de las políticas y prácticas israelíes.
Los expertos expresaron particular alarma ante el aumento de la expansión de los asentamientos y la violencia de los colonos, incluidos los ataques a niños y escuelas.
Varias organizaciones informaron al Comité sobre la práctica de redadas nocturnas para arrestar a niños en Cisjordania, con graves consecuencias para su bienestar y el disfrute de sus derechos.
“Más de 300 niños están detenidos en el sistema militar israelí. La mayoría por delitos menores, como el lanzamiento de piedras y publicaciones en redes sociales”.
Los expertos dicen que los pequeños son llevados a lugares desconocidos, detenidos en vehículos militares y sujetos a amenazas y abusos verbales. Además, a veces se ven obligados a firmar confesiones en hebreo, un idioma que a menudo no comprenden.